St. Dominic Catholic Church

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Homilies


27 de maio - La Solemnidad de la Santísima Trinidad

Dios no es un Ser Supremo.

Dios no es elSer Supremo.

Dios es diferente a todas las otras cosas.

Esto hace que sea difícil hablar sobre Quién es Dios, y Santo Tomás de Aquino dijo que sería mejor si habláramos de lo que no es Dios.

La teología católica dice que la esencia y la existencia de Dios son las mismas.

Eso no es verdad para mí o para ustedes, ni para el universo ni nada de eso.

En el libro del Éxodo, Dios le habla a Moisés desde una zarza ardiente y lo envía a sacar a los israelitas de Egipto.

Moisés pregunta el nombre de Dios, y Dios responde: "Diles a los israelitas, 'Yo soy' me envió a ustedes".

Es una manera de dar a entender que la existencia es una cualidad esencial de Dios.

Dios también se revela como la fuente de todas las cosas en las dos historias de la creación con las que comienza el libro del Génesis.

- no solo en el acto de creación, sino en cada instancia de su existencia continua.

No seguiríamos existiendo sin la acción de Dios.

Entonces nunca deberíamos cuestionar si Dios actúa en el mundo, o si Dios se preocupa por nosotros.

 

Así como la forma de ser de Dios es diferente de la de las criaturas, así también es la forma de actuar de Dios en el mundo.

Porque el ser de Dios es uno, su acción no es distinta de su ser, sino uno con él.

Esto hace que sea difícil decir exactamente cómo actúa Dios, pero una cosa que podemos decir es que la acción de Dios no compite con nuestra actividad.

Él es la fuente de nuestro ser y nuestra actividad, no uno que nos manipula como un titiritero.

Él no es una causa adicionalen el mundo, sino la Causa de todas las causas.

 

La Santísima Trinidad es trascendente, porque Dios es la fuente de nuestra existencia.

Al mismo tiempo, porque Dios es la fuente de nuestra existencia, Él está presente inmanentemente en cada uno de nosotros.

Dios no está presente en las cosas en el sentido de estar combinado con nosotros como parte de nosotros, sino como una causafundamental y amorosa.

Entonces, cuando enfrentas grandes problemas y tienes miedo, inseguridad o abrumamiento, recuerda que Dios está más cerca de tí, que tú mismo.

Y Dios está de tu lado.

 

No podemos sentirque Dios nos mantiene en existencia, pero sabemosque Dios está presente en nosotros por las Escrituras.

En nuestra primera lectura, Moisés recuerda a los israelitas cómo Dios intervino en su historia, rescatándolos de la esclavitud.

Los egipcios adoraban a muchos dioses, pero los israelitas aprendieron que el Señor es el Dios del cielo y de la tierra y que no hay otro.

 

Por más de dos mil años, los Cristianos han tratado de entender cómo hablar de la Trinidad.

Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo son todos igualmente Dios.

Una persona de la Trinidad no es más poderosa o "más Dios" que la otra.

Tampoco hay tres Dioses, sino uno.

Nuestro lenguaje, al igual que nuestras mentes, no puede captar adecuadamente Quien es Dios.

Dios es trascendente, más allá de nosotros. 

Al mismo tiempo, Dios es inmanente, más cerca de nosotros como causa de nuestra existencia contínua, que nosotros para nosotros mismos.

 

Dios eternamente expresa Quién es Él completamente a través de Su Palabra.

Así como mis palabras expresan algo de quién yo soy, la Palabra de Dios expresa quién es Dios, y este es el Hijo, la segunda persona de la Trinidad.

"En el principio era la Palabra y la Palabra estaba con Dios y la Palabra era Dios.

El libro del Éxodo nos asegura la unidad de Dios, incluso cuando el Evangelio de Juan señala que el Padre y Su Palabra son distintos.

"Y el Verbo se hizo carne y habitaba entre nosotros".

Esta es otra forma en la que Dios está presente para nosotros de una manera que podemos entender: como alguien que nos habla, pero que solo habla la verdad porque él es la verdad misma.

En la Palabra de Dios hecha carne, Dios está con nosotros.

Todo lo que el Hijo dice o hace nos revela al Padre de una manera comprensible para la mente humana.

"Quien me ha visto ha visto al Padre", dice Jesús en Juan capitulo 14, versiculo 9.

Y Jesús promete que podemos compartir la relación de amor que Él tiene con el Padre.

En Juan 15 dice: "Si guardas mis mandamientos, permanecerás en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor" (Juan 15:10).

Este amor mutuo del Padre y del Hijo esel Espíritu Santo.

El misterio de la Trinidad es que el serpuro, la verdadpura y el amorpuro existen como unsolo Dios en trespersonas distintas e iguales.

Y el amor de Dios, que es el Espíritu Santo, está presente en nosotros.

Cuando oramos, es el Espíritu el que habilita nuestra oración.

Cuando vivimos por el Espíritu dentro de nosotros, experimentamos una nueva vida y una nueva relación con Dios que nos da la alegría que el mundo no puede dar.

Esa alegría es más profunda que la felicidad.

Es saber que Dios nos ha adoptado como su propios hijos, y compartir los sufrimientos de Cristo es parte de esa adopción.

Así es compartir en su resurrección y gloria.

Todo el propósito de la creación, incluso la Caída, parece ser el deseo de Dios de compartir Su vida, Su bienaventuranza, Su alegría con nosotros.

Entonces Jesús les dice a sus discípulos que hagan discípulos de todas las naciones y que los bauticen en la vida de la Trinidad.

Al guardar Sus mandamientos en esta vida, permanecemos en Su amor ahora.

Y después de esta vida, para siempre.