St. Dominic Catholic Church

Homilies

3 Febrero 2019 - Cuarto Domingo Año C

San Pablo tuvo una relación difícil con los cristianos en Corinto.

El pequeño grupo de conversos se dividió.

Diferentes facciones siguieron a Pablo, Pedro, Apolo y Cristo.

Cada grupo reclamó una vida de gracia aparte de la cruz de Jesús y creyó que hablar en lenguas era la señal de que había recibido el Espíritu Santo.

Así que el apóstol habla de amor, que une a aquellos que tienen diferentes dones y los hace uno.

En nuestra segunda lectura, lo escuchamos describir lo que este amor es y no es.

San Juan Evangelista dice: "Dios es amor", y en muchos sentidos, San Pablo describe no el amor humano, sino el amor divino: paciente, amable, no egoísta, regocijándose por la verdad, aguantando todo tipo de cosas.

Amar como Dios es desear lo bueno para el otro, y no contar el costo.

El amor de Pablo describe un amor que nos estira y nos transforma.

 

He visto este amor entre ustedes aquí: niños cuidando a padres enfermos en su hogar; padres que crían niños con autismo, o discapacidades físicas o mentales.

Nuestros catequistas que semana tras semana pasan parte de sus sábados compartiendo su fe con los niños de esta parroquia, demuestran este amor, al igual que los hombres y mujeres que limpian nuestra iglesia cada semana.

Los feligreses aquí dan su tiempo para alimentar a los pobres de lunes a jueves y dos veces el viernes, y preparan comida para llevar a la Misión Dolores.

 

Al mirar los últimos tres años, me doy cuenta de que no les amaba tan bien como podría haberlo hecho.

En primer lugar, no oré por ustedes lo suficiente.

Con demasiada frecuencia, yo descuidaba de venir a la iglesia a orar ante Jesús en su nombre y, en cambio, trabajaba como si todo dependiera de mí.

Podría haber hecho más para desafiarte a la santidad, que no es solo venir a la iglesia o rezar, aunque son indispensables en la vida cristiana.

Jesús quiere hacer cosas asombrosas a través de nosotros, su cuerpo; cosas que cambiarán radicalmente el mundo.

Él promete en el Evangelio de Juan: "el que crea en mí, hará las mismas obras que yo hago y, como ahora voy al Padre, las hará aún mayores".

Podría haberles amado mejor ayudándoles a ver cómo eres Cristo para los demás a través de tu trabajo como cuidadores, enfermeras, abogados, planificadores financieros, maestros, trabajadores, papás, mamás, esposos y esposas.

 

A veces yo valoraba la popularidad más que la verdad.

San Pablo no tenia ese problema: vivió para Cristo crucificado y no tuvo miedo de experimentar el rechazo, las burlas y los chismes.

El amor que viene de Dios no solo nos estira, es arriesgado.

San Pablo soportaba las palizas, el encarcelamiento y, finalmente, la muerte para proclamar a Jesús.

No les amaba como a Jesús, quien en el Evangelio de hoy es rechazado por aquellos con los que creció simplemente porque les dice la verdad.

No me arriesgaba a decir verdades difíciles con ustedes, y lo siento.

A pesar de que me voy, el consejo pastoral parroquial ha trabajado mucho conmigo para diseñar un plan pastoral para los próximos años.

Compartiré este plan con el nuevo pastor y lo alentaré a implementarlo con la ayuda de los líderes de esta parroquia y el consejo pastoral.

El plan se deriva de encuestas que ustedes completaron y reuniones parroquiales.

El enfoque del plan es la evangelización: ayudar a las personas a encontrar a Jesús.

Tiene tres aspectos, y el primero es la hospitalidad.

Sabemos que en un momento en que las personas se están yendo de la Iglesia, otros también están buscando a Dios con la esperanza de encontrar paz, significado, perdón y pertenencia.

El personal de la parroquia, independientemente del consejo parroquial, también identificó la hospitalidad como un área de mejora, por lo que el Espíritu Santo parece estar empujándonos en esta dirección.

Esta prioridad incluye todo, desde tener nombres de cuartos en los edificios y los mapas del campus parroquial, hasta paquetes de bienvenida para los nuevos feligreses.

Y cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de reconocer y dar la bienvenida al extraño que se encuentra entre nosotros y, posiblemente, está regresando a la iglesia por primera vez en años.

Muchos de ustedes son inmigrantes, y, posiblemente, en ocasiones se han sentido mal recibidos en este país.

Eso no debe suceder a las personas que vienen a nuestra parroquia, sin importar cómo se vean, cómo se visten o lo que han hecho en el pasado.

 

En nuestra segunda encuesta, la respuesta más alta a lo que los feligreses dijeron que querían hacer era "servir a los pobres", por lo que este es un segundo enfoque.

Tenemos muchas oportunidades de servicio en la parroquia como la Sociedad de San Vicente de Paúl, la cena HOPE, el programa de almuerzos, el programa de comidas Dolores Mission y el ministerio LOVE.

Podemos aprender acerca de los programas de extensión ya existentes en Eagle Rock.

¿No sería genial organizar grupos de feligreses para servir a nuestros vecinos y ayudarlos a encontrar a Jesús a través de nosotros?

Unas formas sencillas de ministerio de divulgación es invitar a las personas a venir a sentarse a la iglesia en presencia de Jesús, o a participar en una noche de cine o a una misa dominical.

 

Las encuestas religiosas nacionales indican que los jóvenes están abandonando la Iglesia.

Necesitamos poner recursos y energía en el ministerio para nuestros jóvenes y adultos jóvenes.

Este es un tercer y último enfoque en nuestro plan pastoral.

El ministerio a los jóvenes no tendrá mucho efecto si sus padres no practican la fe.

Es especialmente importante para papá estar en la misa y modelar la oración.

Necesitamos personas para servir y trabajar con los niños desde la escuela intermedia hasta la secundaria para complementar el trabajo de Randy de Vera con nuestros jovenes en el programa de Confirmación.

Tenemos que apoyar a los padres de nuestros jóvenes con recursos para mejorar sus matrimonios y sus habilidades como padres.

Me encantaría ayudar a los casados ​​fuera de la iglesia a bendecir sus matrimonios para que puedan participar plenamente en la gracia que Dios desea para nosotros en los Sacramentos.

Necesitamos expandir nuestro ministerio a los padres que se están preparando para bautizar a sus hijos, y para restablecer una liturgia de la palabra para los niños durante la misa.

Finalmente, tenemos que poner energía en un ministerio de jóvenes adultos para hombres y mujeres que tienen 18 a 39 años para ayudar a nutrir su fe y navegar por un mundo cada vez más secular.

 

El concilio pastoral parroquial discernió estas cosas que Jesús nos puede estar pidiendo, y con Él, todo es posible.

Él nos llama a amarlo, y amar comoél.

Si lo hacemos, él nos dice que es posible que podamos compartir su sufrimiento y rechazo precisamente porque lo queremos, lo seguimos y nos convertimos como él.

Pero recuerden, Dios le dijo a Jeremías que no temiera el rechazo, incluso de su propia gente.

No prevalecerían contra él porque Dios estaba con él.

Aunque no estaré con ustedes mucho más tiempo, Jesús está  y siempre estará con ustedes hasta el final de los días.

Síguelo, y un día volveremos a estar juntos, y nunca estaremos separados, ya que compartiremos eternamente su amor que nunca falla.